¡Buenos días, princesa!

Quiero comenzar este blog, haciendo oda a las instrumentales, sin vocalista. Las clásicas eran sublimes pero hoy quiero hablar de las modernas. Las bandas sonoras de las películas. Y es que pienso que hoy en día es difícil hacerles escuchar música instrumental a la sociedad. Ya muchos compositores sólo hacen bandas sonoras de largometrajes porque es la forma más fácil de hacer llegar su música al resto de la humanidad. No todo el mundo puede permitirse pagar conciertos, o comprar discos. Sin embargo, mucha gente va al cine.
Ennio Morricone, Yann Tiersen, Hans Zimmer, John Williams. Son de los grandes. De verdad, hay bandas sonoras que te expresan más que la propia película en sí. Me satisface cuando voy al cine, y los primeros diez minutos antes de que empiece la película. Sentada en la butaca, reconozco la música que ponen mientras te hacen esperar. La lista de Schindler, Piratas del Caribe, Pearl Harbor, Amelie. Las películas sin música, no serían más que imágenes sin sentido. La música da color a todo, sin que te des cuenta. Y hoy, dejo varios ejemplos de esa música que un cualquiera no se para a escuchar. Deleitaros, y gracias por leer. Un saludo. A.G. Menárguez.